Remarketing y retargeting

remarketing y retargeting

Entre los profesionales del marketing online no hay consenso entre la diferencia entre remarketing y retargeting. Unos prefieren utilizar la nomenclatura de Google (“remarketing”) y otros el concepto más tradicional de “retargeting”.

Una diferencia que puede haber es que el concepto de remarketing es más amplio que el concepto de retargeting. El remarketing, por ejemplo, puede consistir en mostrar un anuncio de display en una web externa a un usuario que ha estado en tu web (y éste suele ser el uso más habitual de “remarketing”), pero también puede ser un email que se genera automáticamente a un usuario que ha completado dos pasos en el checkout pero no el tercero, o que ha comprado un producto y al cabo de un día se le ofrece otro complementario (ahí chocaría con el cross-selling y el up-selling).

La mejor definición es en inglés: “Behavioral retargeting”. Es decir, retargeting basado en el comportamiento, es decir publicidad basada en sus acciones precedentes en Internet.

Para identificar ese usuario, la web deja una cookie en el ordenador de ese usuario y, cuando ese usuario accede a una página web del mismo sistema publicitario que usa el anunciante, entonces esa otra web en vez de enseñarle un anuncio genérico le enseña un anuncio relativo a lo que hizo en la primera web. Por ejemplo, anunciarle zapatos en oferta en elmundo.es si antes ese usuario estuvo en una web de zapatos.

Para escoger qué usuarios serán objeto de retargeting, tienen que cumplir con unas condiciones que marca el anunciante. Por ejemplo, que haya visto la página de zapatillas de correr pero no haya comprado ninguna. En AdWords, que es la plataforma que ha popularizado el remarketing, eso se hace con las “listas de remarketing”, listas ciegas de usuarios que cumplen con una serie de condiciones. Esas listas se crean desde la biblioteca compartida, en la sección de Públicos. Una vez creada esa lista, se puede crear una campaña de Display que ataque esa lista de remarketing, es decir los usuarios que cumplen con las condiciones marcadas en la lista.

Para implementar la lista, AdWords genera un trozo de código HTML que hay que pegar en la página clave que los usuarios tendrán que ver para que entren en la lista. Por supuesto, esa lista es ciega, no hay nombres ni apellidos. Es sólo una metáfora de un conjunto de personas que cumplen con una serie de condiciones y que serán objeto de remarketing, es decir que verán nuestros anuncios en otras webs.